El Grado en Educación Social es una titulación oficial de la Universidad de Alcalá que te permitirá trabajar en un sector muy dinámico, con amplias salidas profesionales y desempeñar una labor de gran relevancia para la sociedad.
Los educadores sociales son profesionales sensibilizados con las necesidades de las personas que, gracias a una formación de calidad en contenidos y prácticas, a través de intervenciones socioeducativas creativas y eficaces, colaboran en la mejora de la calidad de vida de las personas con las que trabajan y en la creación de un mundo más justo y solidario.
VÍAS DE ACCESO
Bachillerato y Pruebas de Acceso a la Universidad.
CFGS-FP II.
Sistemas Educativos Extranjeros.
Titulados Universitarios o Estudios universitarios parciales.
Estudiantes de anteriores legislaciones (LOGSE, COU, PREU o equivalente) y Selectividad.
Pruebas de acceso mayores de 25, 40 y 45 años
Primer Curso
Psicología del desarrollo
Didáctica general
Evolución y perspectivas de la Educación Social
Pedagogía social
Tecnologías de la información y la comunicación en contextos educativos
Habilidades sociales
Psicología de la Educación
Antropología social y cultural
Sociología de la Educación
Animación sociocultural
Segundo Curso
Política y legislación social
Procesos de desadaptación social
Dinámica de grupos
Planificación y gestión de programas, centros y recursos sociales
Métodos y técnicas de investigación en Ciencias Sociales
Atención socioeducativa en el estado de bienestar
Acompañamiento y mediación
Técnicas de modificación de conducta
Psicología Social
Inmigración y diversidad cultural
Tercer Curso
Personas mayores
Menores en situación de riesgo social
Educación en el tiempo libre
Medio escolar
Educación de personas adultas
Instituciones cerradas
Inclusión social
Familia
Prácticum I
Cuarto Curso
Optativa 1
Optativa 2
Optativa 3
Transversal 1
Transversal 2
Prácticum II
Trabajo fin de grado
Metodología
Ofrecemos una metodología activa y constructiva, basada en los principios de aprendizaje centrado en el alumno, con metodologías activas y participativas, que conllevan la planificación y el diseño de acciones formativas que fomentan el trabajo autónomo.
El empleo de estas metodologías permite mejorar las posibilidades de aprendizaje y hacer experimentar al estudiante con herramientas que puede poner en marcha en su práctica profesional en el futuro, como:
Aprendizaje Basado en Problemas y Retos (ABP/ABR).
Aprendizaje cooperativo
Tertulias dialógicas
Trabajo por proyectos y actividades interdisciplinares
Uno de los principios educativos del modelo de enseñanza y aprendizaje es la relación cercana con el estudiante para potenciar su desarrollo, situando a éste en el centro del proceso para favorecer el pensamiento crítico, la autonomía y responsabilidad.
En los equipos multiprofesionales de los servicios sociales comunitarios, de atención primaria.
En atención a la infancia (equipos de atención, centros de acogida, centros de intervención en medio abierto, prevención e intervención en el medio familiar)
En instituciones penitenciarias y de rehabilitación.
En centros ocupacionales.
En casas de cultura y entidades sociales.
En áreas o departamentos de juventud, cultura, enseñanza y bienestar social.
En residencias y centros para la tercera edad.
En educación de personas adultas e inserción sociolaboral.
En actividades de educación ambiental y turismo social.
En centros educativos en prevención del absentismo, mejora de la convivencia, prevención (violencia, salud, drogas y educación sexual) y tiempo extraescolar.
Comprender los fundamentos de la acción socioeducativa.
Diseñar programas y proyectos que tengan como finalidad mejorar la vida de grupos o individuos en situaciones de riesgo de exclusión social.
Anticiparse a las necesidades educativas integrales de los alumnos, teniendo en cuenta su entorno familiar y sociocultural.
Conocer los agentes, recursos y redes propios de la acción educativa.
Aprender a planificar, gestionar y evaluar las actividades y procesos orientados a la promoción cultural y social de la ciudadanía.
Desarrollar la capacidad crítica y el compromiso ético en el diagnóstico de los problemas sociales.